The cell (2000)

- ¡Mientes! Perra, zorra... ¡puta!
- Suenas como tu padre.
- ¿Mi padre? NO ERA NADA. ¡NO ES NADA!


Es complicado presentar correctamente a una peícula como "The cell". Debería, bajo toda métrica, ser un desastre; es la primera gran película de un director de videoclips (Tarsem Singh) con una protagonista (Jennifer López) poco reconocida por su talento artístico y un guión que, en pleno 2000, evocaba tanto al "El silencio de los inocentes" como a "Matrix". El resultado demuestra que en este tipo de experimentos no hay medias tintas. Es sencillamente excelente.

Carl Stargher (Vincent D’Onofrio, comíendose la pantalla) es un asesino serial que encierra a jóvenes en una cámara para luego llenarla lentamente de agua y ahogarlas. El FBI, bajo el mando del agente Novak (Vince Vaughn) se encuentra a punto de apresarlo y liberar a su última victima cuando Stargher cae en coma, producto de virus que lo deja en un raro estado de esquizofrenia. Permanente, explica un doctor.

Al mismo tiempo, tenemos a a Catherine Deane (J-Lo) , una psicóloga infantil reclutada en un proyecto experimental que permite a dos personas compartir, literalmente, sus mentes. Nos enteramos que un poderoso billonario tiene a su hijo en estado catatónico y Catherine trabaja con el mismo, visitándolo dentro su propia mente e intentando convencerlo de volver al mundo real. Es entonces cuando el FBI sugiere usar la misma tecnología para entrar a la mente de Stargher y conseguir la ubicación de la victima antes de que sea tarde.

Este argumento, trillado si se quiere, es utilizado efectivamente para establecer una historia de persecución que ya de por si tiene un muy buen ritmo. La película, sin embargo, estalla cuando Catherine ingresa por primera vez a la mente del asesino.


Es muy común encontrar películas con representaciones poco creíbles (y hasta aburridas) del subconsciente. "The Cell", al contrario, nos regala una mundo con una fotografía increíble donde la lógica, la gravedad y hasta la continuidad son subjetivas. Es la mente fracturada de un hombre fracturado, donde convive un asesino serial que se ve a si mismo como un dios y como un niño abusado aferrándose a sus últimos vestigios de inocencia. La manera en la que el director nos muestra a Catherine hundíéndose de a poco en este mundo para intentar reconstruír la historia de Stargher a partir de imágenes aparentemente inconexas, bizarras y hasta hermosas resulta muy poco usual. Es atrapante.

La película tiene tambíén subtonos filosóficos interesantes. Stargher no es un villano en blanco y negro; es un hombre a quien tanto la naturaleza como sus propios padres le han fallado y con quien, llega a entender Catherine, la psicología encuentra limitaciones. Novak se encuentra frustrado de similar manera, uniéndose al FBI luego de encontrar que su trabajo como fiscal no siempre garantizaba justicia. También vemos las diferentes maneras en la que los protagonistas recurren a Dios; Stargher entiende que un evento de su infancia lo ha acercado a su creador y termina igualando sufrimiento con su propia salvación. Su padre justifica la crueldad a su propio hijo con religión. Y Catherine, intentando salvar tanto al asesino como al niño millonario, se visualiza repetidamente a sí misma de manera casi virginal.

La fotografía de "The cell" destaca, pero quedarse sólo con ella sería injusto. Es un buen thriller de misterio, una respetable película de ciencia ficción y, sobre eso, un gran drama psicológico. El final nos lleva a un climax que combina de manera sublime tres historias en una única secuencia; y aún con algunos cabos sueltos (y ganas de conocer más a fondo a sus personajes) resulta absorbente y deja mucho que pensar una vez terminada. No hay mayor horror que el que existe en la mente de cada hombre.

Recomendadísima.

6 comentarios:

  1. Pinta ser una película interesante, pero me resisto a ver algo de Jennifer Lopez.

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  2. ¡No! ¡Si J Lopez es una ídola! (aunque admito que no es muy buena actuando... pero le reconozco que mejoró una banda :) )

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  4. No pienses en esta peli como "una peli de J-Lo". Es mas, actua Vince Vaughn tambien, que ultimamente solo hace comedias pedorras y el tipo la rompe.

    Hasta te diria que mejoran el promedio de sus carreras.

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  5. Sobrecogedora, aterradora, angustiante, magistral, inquietante, y podría seguir. La vi en el cine cuando se estreno y salí pensando que esta película era muy diferente a todo lo que había visto antes, solo por la etética ya vale la pena verla, pero hay más, Vince es el centro de la película, se me ponen los pelos de punto solo de pensar en alguna escena en las que sale y son muchas. En fin ha sabido captar mi atención y eso no es fácil, llevo mucho cine visto...

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